El 100% de créditos.
Una de las cosas que recuerdo perfectamente de mi pastor Juan Picasso,
es una enseñanza en donde manifestó lo siguiente: asistir al templo, representa
solo un 10% en beneficio a tu vida como cristiano. La interrogante ante
tal declaración es: ¿cómo alcanzó el otro 90%? ¿qué otras cosas
ayudarán a alimentar a mi alma? ¿qué debo de
hacer para sentirme satisfecho con mi estilo de vivir como hijo de Dios al
termino de cada semana?
Te presento SIETE formas que desarrollo cotidianamente y que te ayudarán a
alcanzar el 100% de los créditos que debes obtener semana a semana para
desarrollar la santificación progresiva con pequeñas acciones
diarias que, a su tiempo, van a dar fruto de salvación en tu alma:
1. Lee la Biblia
Bien nos dice el apóstol Pedro que, si
hemos gustado de la bondad del Señor, deseemos “como niños recién nacidos, la leche pura de la
palabra, para que por ella crezcan para salvación” (1 P. 2:2). Por un lado, ya que Dios es el autor de la Escritura,
ningún otro libro puede mostrarnos a Él como las Sagradas Escrituras. Al
conocer de la Palabra, nos permitirá ser renovados en nuestra mente para
desarrollar una vida acorde a la Voluntad del Padre. Por otro lado, ya que Dios
es nuestro creador, ningún otro libro puede explicarnos mejor lo que somos y la
manera en que debemos de vivir.
2. Ora
El Señor Jesús le hizo este sobrio
recordatorio a sus discípulos: “Velen y oren
para que no entren en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es
débil” (Mt. 26:41). Necesitamos de la oración para fortalecer nuestra
vida espiritual.. Nuestro espíritu es fortalecido al pasar tiempo buscando el
rostro de nuestro Señor, y así podemos ser fortalecidos para el día de la
tentación o los tiempos de crisis. Orar es más que emitir palabras…simple y
sencillamente es tener intimidad con nuestro Dios.
3. Escucha sermones
Un buen sermón no es más que una correcta
exposición de la Palabra, y el primer sermón de los apóstoles nos recuerda los
resultados de escuchar correctamente un sermón lleno del poder de Dios: “Al oír esto, conmovidos profundamente,
dijeron a Pedro y a los demás apóstoles: “Hermanos, ¿qué haremos?” (Hch. 2:37). Hoy tenemos la bendición de poder escuchar cientos o
miles de exposiciones de la Palabra que pueden también conmovernos
profundamente y llevarnos a adecuar nuestras vidas a la voluntad de Dios. Te
recomiendo los sermones que se graban en nuestra Comunidad Cristiana Bethel;
predicas del pastor Gilberto Gutiérrez Lucero; temas con el pastor Cash Luna o
Guillermo Maldonado.
4. Asiste a un GAA (grupo de
amor en acción) o a un Discipulado
Participar en un grupo
pequeño y ser cuidado por un líder/mentor es una de las cosas que van
afortalecer tu vida spiritual a media semana, además de que tundras la
oportunidad de experimentar el compañerismo Cristiano con los demás miembros
del grupo (GAA). Los miembros de la Iglesia primitiva se reunían en el Templo y
por las casas todos los días.
5. Visita a un enfermo y ora
por él.
La vida Cristiana no se trata solo de
recibir y que nos atiendan. Uno de los rasgos que más hace crecer a un
Cristiano es compartir con otros lo que sabe, sus dones, sus talentos, sus
bienes., etc. ir a un hospital para orar por los enfermos o dar una Palabra de
aliento a los familiars, te hará crecer de una manera especial. Recuerda que
somos llamados a ser canals de bendición.
6. Asiste a los cultos de una
Iglesia Cristiana
El escritor del Salmo 84
expresa una idea clara de la importancia de acudir a la Casa de Dios:
v. 2 Anhela mi alma
y aun ardientemente desea los atrios de Jehová;
Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo.
v. 4 Bienaventurados los que habitan en tu
casa;
Perpetuamente te alabarán.
Desear estar en los servicios en donde se alaba la grandeza
de Dios, se escucha de Su Palabra y se fortalece el compañerismo con los demás
miembros, son créditos a nuestro favor para crecer espiritualmente. No dejes de
asistir a una Congregación Cristiana, como algunos tienen por costumbre
(Hebreos 10:24-25)
7. Evangeliza
Nosotros
fuimos creados en Cristo Jesús para buenas obras (Ef. 2:10), siendo la principal de todas el
cumplimiento de la Gran Comisión (Mt.
28:19-20). Bien
nos advirtió nuestro Señor que “Ustedes son la sal de la tierra; pero si la sal se ha vuelto insípida,
¿con qué se hará salada otra vez? Ya no sirve para nada, sino para ser echada
fuera y pisoteada por los hombres” (Mt. 5:13). Así como el agua estancada se estropea,
un discípulo que no está compartiendo su fe se atrofia. Por el contrario, un
discípulo que está constantemente hablándole a otros de Jesús se renueva y se
llena del Espíritu Santo. Entonces: ¡evangeliza! Haz tu función como sal y luz
y cuéntale a otros acerca de la vida y muerte de Cruz de Jesús el Hijo de Dios
a favor de pecadores como tú y como yo. (1 Tim. 4:16).
REFLEXION
- Crecer espiritualmente no es una opción, es un DEBER y una NECESIDAD para aquel que conoce de Dios, ¿cómo estás desarrollando tu crecimiento espiritual semana a semana?
- De las siete formas de crecimiento espiritual que se presentaron en este Devocional, ¿qué áreas tendrás que fomentar en tu vida espiritual?
- Un día leí la siguiente frase: o crecer o morir espiritualmente, ¿cómo está el estado espiritual en tu vida? ¿estás creciendo o muriendo?
- ¿Qué otro aspecto agregarías a tu vida espiritual para fortalecerte y ser un canal de bendición para los demás?
Pastor Oscar Hernández. Para invitarlo a
conferencias o talleres sobre temas cristianos y liderazgo llamar al 017351525825 o
escribe: oscarhp07@hotmail.com