SER PARTE DE LA SOLUCION, NO DEL PROBLEMA

        Romanos 8:28

 “Ahora bien, sabemos que dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito”

         Queramos o no, en toda circunstancia que nos toca ser parte de ella ya sea en el hogar, en el trabajo, en la escuela, en el caminar, en el deporte o en cualquier otra actividad, seremos parte del problema o de la solución de  la misma.

      ¿eres parte de la solución o parte del problema?

        Y es algo que lo elige uno mismo. Consciente, o inconscientemente es una decisión que adoptamos, y por tanto, es nuestra responsabilidad.

                Básicamente se trata de la actitud que adopto para enfrentarme a las situaciones. ¿Veo escasez o veo posibilidades?

        La forma en la que enfrento a la vida, marca la diferencia radicalmente en el tipo de resultados que puedo alcanzar.

        Ser parte de la solución implica:

• Tener una actitud de querer lograr el mejor futuro posible.
• Poner el foco en lo que hasta ahora ha funcionado, potenciarlo, y desde ahí construir buscando oportunidades en el océano azul que es el futuro.
• Centrarse en lo que se puede hacer, por poco que sea, con la esperanza y la ilusión de que tras la curva el camino se ensancha… y aparecen nuevos cruces de caminos.
• Compartir lo que ves en esa situación, y escuchar la imagen de los demás.
• Significa buscar los recursos que tienes en tu interior, ¿qué funcionó en otras circunstancias? ¿cómo puedo aplicar esa solución a esta realidad? ¿cómo puedo adaptar esa solución al escenario actual?
• Es buscar los recursos que están a tu alrededor y a los que puedes acceder por tus medios, o a través de la cooperación de otras personas
•  Actuar desde la responsabilidad personal, sabiendo que eres tú quien debe tomar las riendas de tu vida.
•  Significa dar tú el primer paso para que, tal vez, otras cosas a tu alrededor también puedan cambiar.

¿No crees que esta actitud ofrece, cuanto menos, mejores alternativas de futuro?

          Pues está en tus manos, es una decisión íntima y personal, un compromiso con uno mismo. Esta actitud no se puede ni imponer, ni implantar desde fuera. Sólo la puedes adoptar, ¡ Tú eliges, ¿eres parte de la solución o del problema?

       CONCLUSION

1. Son desafiantes los ocho puntos anteriores que nos ponen en el terreno para ser parte de la Solución ante cualquier circunstancia.
2. Ser parte del problema es hacer totalmente lo contrario a lo que es ser parte de la Solución.
3. Tener una actitud que me permita ser parte de la solución y no del problema, marcará la pauta para tener una mejor perspectiva de vida.

       REFLEXION

• La clave entre ser parte de la solución o del problema está en la actitud que tome uno ante las circunstancias, ¿cómo suele ser tu accionar ante las situaciones que enfrentas cotidianamente?
• Se dice que es más fácil destruir que edificar, ser parte de la solución es más dificil que ser parte del problema, ¿en que parte te identificas: en la solución o en el problema?
• Ser parte de la solución es navegar en un ocèano de oportunidades, ser parte del problema es estancarse en un charco de agua, ¿en dónde esta tu barca? ¿Está en el océano o en un charco?

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Pastor Oscar Hernández C.

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