Siendo participes del programa de Dios

      

       Hageo 1:14

 Y despertó el SEÑOR el espíritu de Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el espíritu del sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y el espíritu de todo el remanente del pueblo. Y vinieron y comenzaron la obra en la casa del SEÑOR de los ejércitos, su Dios,

       Después de retornar del exilio babilónico, el pueblo de Israel enfrenta un panorama desgarrador. Nabucodonosor había destruido a su ciudad, incluyendo a la incomparable estructura del Templo de Salomón. Las trabajos en la reconstrucción del nuevo templo progresaban hasta que se levanta una nueva oposición. Por espacio de dieciséis años, los judíos olvidan por completo la inconclusa Casa de Dios para ir en pos de su prosperidad. En el escenario aparece Hageo, un anciano profeta, un portavoz sincero de Dios, que no escatima palabras en su llamado a terminar lo que habían comenzado en el Templo de Dios…Hageo los persuade a ser participes del programa del Dios Todopoderoso.

          El profeta en sus escritos establece cuatro puntos de suma importancia para reincorporar a los hebreos en el programa de la reconstrucción de la Casa de Dios:

         Estar vinculados. “Y despertó Jehová el espíritu de Zorobabel…y el espíritu de todo el resto del pueblo, y vinieron y trabajaron". Es hermoso observar que Dios intervino de manera sobrenatural para despertar a su pueblo y éstos estuvieran dispuestos y disponibles para trabajar. Siempre es necesario  conexionarnos con el Espíritu del señor para que la visión sea clara y tengamos disposición para realizar la tarea que se nos encomiende. La gente que no participa en el programa de Dios haciendo su Obra, simplemente no está vinculada con Él.

         Tener ánimo. “Esfuérzate, dice Jehová…y cobrad ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y trabajad porque yo estoy con vosotros” (2:4). A veces son las dudas en nuestro ser las que nos llevan al desánimo, en otras ocasiones son los malos entendidos, o quizás el no sentirnos valorados. Los Hebreos estaban viviendo una etapa muy complicada y difícil, el desaliento les contaminaba en su diario vivir; pero Dios les exhorta a cobrad ánimo. Estas siguen siendo las mismas palabras que Dios usa para alentarnos ante el desánimo. ¡Cobrad ánimo! Y regresad al redil…¡cobrad ánimo! Y retomad el ministerio… ¡Cobrad ánimo! Y volved a intentarlo una vez mas… ¡Cobrad ánimo! Y trabajad.

         Ser limpio. “Y asimismo toda obra de sus manos, y todo lo que aquí ofrecen es inmundo…meditad, pues, en vuestro corazón, desde este día en adelante…desde este día os bendeciré” (2:14,18-19). Para poder servir al Señor, necesitamos limpiarnos de todas esas cosas inmundas que no le agradan a Él. Meditad o reflexionar en nuestros corazones nos dará la pauta a tener en claro cuáles son esas cosas que tenemos que abandonar o evitar para que nuestras vidas sean usadas como una bendición. Mucha gente no sirve y ama a Dios, no porque no lo anhele, a veces les resulta complicado renunciar a esas cosas que manchan sus vidas y que les impiden estar cerca del Señor.

         Ser feliz. “Porque yo te escogí, dice Jehová de los ejércitos” (2:23)

        CONCLUSIONES

         Existe un himno que en su coro dice:

Placer verdadero es servir al Señor;

No hay obra más noble, ni paga mejor.

Servirle yo quiero, con fe y con amor;

Servirle prometo desde hoy.

CORO

Servir a Jesús Servirle con fe

Que paga tan rica tendré

No importa que sufra; sufrió el por mí.

Sirviendo a Jesús; soy feliz.

         Tengo cerca de veinticinco años de servir a mi Dios como pastor, y puedo afirmarles que no hay mayor felicidad que la de estar en las sendas de Él y servirle con todo tu ser.

           REFLEXION

• Ser parte del programa de Dios es todo un privilegio; pero debemos tomar muy en serio esta bendición para que Él también nos tome en serio, ¿cuál es tu actitud y compromiso dentro del programa de Dios?
• El pueblo de Israel ante sus circunstancias decidieron por varios años dedicarse a la búsqueda de su propia prosperidad, olvidándose de ser parte del programa de reconstrucción de la misma Casa de Dios, ¿estás siendo activo dentro del programa de Dios a través de los Dones y Ministerios?
• Entre más trabajemos y colaboremos estableciendo el reino de nuestro Dios, mejores bendiciones serán derramadas sobre nosotros, ¿estás dispuesto a ser un Instrumento en las manos de Dios para seguir estableciendo el reino de Dios?

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        Pastor Oscar

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