martes, 8 de noviembre de 2016

Problemas con los pleitos?

        

          Proverbios 29:22
        La persona enojada comienza pleitos; el que pierde los estribos con facilidad comete todo tipo de pecados.”

      Proverbios 15:18a
“El que es iracundo provoca contiendas.”

      Se dice que para que existe un pleito, se necesita de por lo menos dos personas. Dicho pleito iniciara por lo regular cuando un individuo se encuentra iracunda o enojada. Proverbios 30:33 nos dice que cuando se forza la ira, se produce el pleito. Toda contienda es una evidencia de nuestra carnalidad. El Apóstol Pablo dijo: porque todavía sois carnales, pues habiendo celos y pleitos entre vosotros, ¿no sois carnales y andáis como hombres? (1 Co 3:3)
        La Biblia narra muchos casos de pleitos entre grandes personajes. Uno de los más sonados fue el de Esaú y su hermano Jacob. El pleito entre ellos se inicia desde que estaban en el vientre de su madre, ambos querían salir de allí en primer lugar;  poco a poco se fue incrementado la problemática al tener sus padres preferencia de manera separada por ellos. La gota que derramo el pleitaso, fue cuando Jacob usurpa el derecho de su hermano Esaú y toma la bendición de su padre Isaac sin ser el primogénito. Esto provocó una ira en Esaú que intentó terminar con la existencia de Jacob. Estos actos los llevaron a estar separados por más de 14 años.
            El apóstol Pablo entendiendo los efectos tan tremendo que pueden provocar los pleitos en la sociedad y en las Iglesias, escribe lo siguiente: Os ruego, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que todos os pongáis de acuerdo, y que no haya divisiones entre vosotros, sino que estéis enteramente unidos en un mismo sentir y en un mismo parecer. Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por {los} de Cloé, que hay contiendas entre vosotros. Me refiero a que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo, yo de Apolos, yo de Cefas, yo de Cristo 1 Co 1:10-13

      CONCLUSIONES (medita en las siguientes frases)

        Se ha de hablar como en testamento, que a menos palabras, menos pleitos.

      Es posible conseguir algo luego de tres horas de pelea, pero es seguro que se podrá conseguir con apenas tres palabras impregnadas de afecto,

        Los hombres serenos, pelean mucho menos.

        Más vale comer pan duro y vivir en paz, que tener muchas fiestas y vivir peleando.

        “Los pleitos no durarían tanto tiempo si el error estuviera sólo en una parte.”

      REFLEXIONES
  • La persona enojada suele casi siempre iniciar los pleitos, ¿cómo controlas al enojo en tu vida?
  • El pleito entre Esau y Jacob los llevó a estar separados por más de 14 años, ¿tienes alguna relación rota a causa de un pleito?
  • Los hombres serenos, pelean mucho menos que cualquier iracundo, ¿muestras calma ante la oportunidad de un posible conflicto?
  • Los pleitos suelen originar muchas divisiones entre las personas, ¿tomas el desafío de no ser parte de un pleito que pueda provocar divisiones con los que te rodean?
           _______________________________________________________________
          Pastor Oscar
         Invitaciones a conferencias o talleres sobre estos temas o de liderazgo, llamar al 017351525825 ó escribe al correo: oscarhp07@hotmail.com



2 comentarios:

  1. Para no provocar pleitos se necesita templanza, que es fruto del Espíritu, cómo seguidores de Cristo es necesario poner cuidado en no generar contienda, sino en ír a la paz.
    Dios ayúdame a ser una persona pacífica, que no genera conflicto, sino que llama a paz a todos en su entorno. En mi fuerza es muy difícil Señor, pero su tú me ayudas sé que puedo lograrlo.
    Amén.
    Bendiciones

    ResponderEliminar
  2. totalmente de acuerdo con usted mi hna Elena...Dtbm

    ResponderEliminar