Mateo 18:6
Pero al que
haga tropezar a uno de estos pequeñitos que creen en mí, mejor le sería que le
colgaran al cuello una piedra de molino de las que mueve un asno, y que
se ahogara en lo profundo del mar.
Considero que en lo más profundo del ser ,
todas las personas, incluyendo a las más negativas, quieren ser como esos
ascensores que eleven a otros que están a su alrededor. No me gusta pensar en
aquellos individuos que buscan derrumbar a los demás con palabras o acciones
sumamente negativas que hacen sentir
incomodos a quienes las reciben.
Todos debiéramos querer ser una
influencia positiva en la vida de otros, y la verdad es que sí se puede lograr
si se tiene la intención correcta en nuestro interior. Si quieres elevar a la
gente y añadir valor a su vida, te recomiendo que tengas presente lo siguiente:
Debes de tener presente que los
elevadores se comprometen todos los días a
ser alentadores, aclaro, inspiradores, más no lisonjeros. El filósofo
romano Lucio Anneo Séneca dijo: donde haya un ser humano, habrá una
oportunidad para la bondad. Si quieres ser un elevador para la gente que te
conoce, anímalos y añádeles valor todos los días.
Los elevadores conocen la gran diferencia
entre herir y ayudar, entre derrumbar y edificar, entre
hacer sentir mal y hacer sentir bien. Los pequeños detalles que
tienes cada día con los demás, tienen un efecto mayor de lo que tu crees. Una
sonrisa, más que un ceño fruncido puede hacerle el día feliz a alguien. Una
palabra de asentamiento en lugar de un reclamo o una censura, puede lograr
mayor confianza en quien lo dices. Una palabra amable en lugar de una critica,
puede elevar la moral de una persona en lugar de hundirla. Tu y yo tenemos el
poder para hacer la vida de otra persona mejor o peor a través de nuestras
palabras o acciones. Las personas más allegadas a uno son las más afectadas de
manera positiva o negativa por lo que uno dice y hace…hay que usar este poder
de manera sabia.
Los elevadores inician lo positivo en un
ambiente negativo. El
promotor de la revolución americana Benjamin Franklin contó en su autobiografía
acerca del hecho de haber pedido un favor para crear una conexión positiva en
un ambiente negativo. En 1736, Franklin fue considerado para una posición como
secretario de la asamblea general. Solo una persona se opuso a su nominación,
un hombre poderoso a quien no le gustaba Franklin. Esto fue lo que escribió
Franklin: “tras enterarme de que tenía en su biblioteca cierto libro muy
escaso, le escribí una nota expresando mi deseo de echarle un vistazo y le pedí
el favor de que me lo prestara”. El hombre se sintió halagado y gustoso de
recibir su petición, le presto el libro a Franklin y se volvieron amigos toda
la vida.
Los elevadores
entienden que la vida no es un ensayo. Existe una frase muy
bonita que dice: “pasaré por este mundo nada más que una vez. Por eso,
cualquier bien que pueda hacer o cualquier bondad que pueda mostrar a cualquier
semejante, déjame hacerlo ahora. No puedo postergarlo ni descuidarlo, pues no
volveré a pasar por aquí otra vez”. Huauuu, la gente que eleva a los demás no
espera hasta mañana o que llegue algún día especial para ayudar a la gente,
sino que ¡actúa ahora mismo!
Cada
persona en el mundo tiene la capacidad de convertirse en alguien que eleva a
los demás por sus dichos y por sus hechos
CONCLUSIONES
Te has
estado criticando a ti mismo años y años y no ha funcionado?. Trata aprobarte a
ti mismo y mira qué ocurre.
Elevar
a alguien le da la oportunidad de proyectarse a nuevos niveles de logro en su
vida…hacer lo contrario con ese alguien es meterlo en el pozo de la
desesperación.
No te
atrevas, por más de un segundo, rodearte de gente que no es consciente de tu
grandeza. Todos tenemos la sagacidad de saber escoger a las personas correctas
que bendecirá a nuestra existencia.
El
desafío más difícil es ser tú mismo en un mundo en el que todo el mundo trata
de que seas alguien más. -Eres tan increíble como te dejas serlo. Déjame
repetirlo. Eres tan increíble como te dejas serlo.
REFLEXION
- Se trata de ayudar a elevar en todos los sentidos a quienes nos rodean, no hacerlos tropezar o disminuirlos en su motivación, ¿elevas o disminuyes con tus dichos y acciones?
- La gente que suele elevar a otros, tiene el firme compromiso de ser un agente de motivación, ¿habitúas inspirar a los que te rodean de manera constante?
- A pesar de los ambientes o individuos negativos, se puede ser positivo para elevar la autoestima de quien está a tu lado, ¿logras vencer al negativismo con una actitud adecuada para lograr elevar a otros?
- La gente que eleva a los demás no espera hasta mañana o que llegue algún día especial para ayudar a la gente, sino que ¡actúa ahora mismo!, ¿sueles ocupar cada día y cada oportunidad para motivar e inspirar a los demás?
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Pastor Oscar
Invitaciones a conferencias o talleres sobre estos temas, llamar al 017351525825 ó escribe al correo: oscarhp07@hotmail.com
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